1 de Mayo del 2020
Llevamos más de un mes de reclusión en casa, y se ha sentido todo tan extraño, como una anormalidad que nunca se vuelve cotidiana.
He sentido algo de dolor de garganta, esa sensasión difusa de que te vas a enfermar, seguro que no es grave.
Escucho música introspectiva a las 11 de la noche y comparto la cama con el amor de mi vida y nuestras dos Schnauzer, como si fueramos una manada aunque pensando lo bien en realidad lo somos, una manada que se refugia en casa en el lugar más seguro del mundo. Estamos viviendo esta experiencia de náufragos citadinos en medio de una pandemia global y esta extraña pausa que vivimos, y tenemos la suerte de vivirla justo con la persona con la que quisieramos vivir si fueramos náufragos de verdad.
Escucho Himno Eterno, de Porter, que habla de cosas tristes, es decir de gente que se ha ido. A nosotros, a Ana y a mi, nos unió de alguna forma el dolor que sentimos por las personas que perdimos, y aunque pareciera algo triste. también es muy lindo compartir la vida con alguien que te entiende y con quien dia a dia puedes y reparando esos pedazos rotos que se han ido resquebrajando a lo largo de tantos años de añoranza y pérdida.
Asi que aqui estoy, con ella a mi lado y me siento feliz, y nos sentimos seguros en nuestra isla de naufragos citadinos de tercer piso. Y agradezco por la vida es algo tan hermoso, tan profundamente hermoso y terrible que no encuentro palabras para definirla, a lo mejor solamente se trata de exisitir, experimentar lo que la vida te aviente y tomarlo con brazo abiertos, sin pensar en el tiempo que dure, o si pudiera cambiar en cualquier momento.
Me gusta leer cosas de hace muchos años, propias y de otras personas, pensar en esos años que han pasado, como era todo, como eramos nosotros y lo que pensabamos y sentíamos, me gusta hacer cronología de como se fueron dando las cosas, donde estaba a los 20, a los 21.. donde pude haber estado en una fecha aleatoria como el 13 de junio de 2002..., que pensaba, quien era o que sentía.
La verdad es que es imposible, solamente tenemos fechas clave a las que nos agarramos como las personas que sube una montaña y nos ayudan a hacer un mapa general de nuestra vida. Es un poco triste pensar que esos "momentos clave" suelen ser momentos triste.., comom el día que hospitalizaron a mi mamá para nunca volver a casa.., o el día que, varios años después sentí conciencia de mi profunda soledad y lloré en silencio un martes cualquiera..
Es un momento muy fuerte del mundo, se están llendo muchas personas por una causa común, una nueva enfermedad que nadie vio venir.., y es cierto que hay personas que no toman en cuenta las recomendaciones pero también hay muchos que no tienen otra opción.., es como si fuera una noche larga de la que no todos van a salir.., de hecho muchas veces he tenido ese sueño que no puedo definir porque siempre cambia pero el guion principal es ese.., algo pasa y muchas personas no sobreviven la noche, nos juntamos al final de todo y aunque no lo digamos sabemos que hay quienes se han quedado atrás..
Al final de la noche siempre hay un nuevo día, pero tristemente no todos la sobreviven, es un momento de cambio profundo en el que el futuro nos dice que todo será distinto., Siempre ha sido así pero se siente mucho más que nunca..
viernes, 1 de mayo de 2020
lunes, 16 de marzo de 2020
Cambio de estación
Es la una de la mañana de un lunes, terminando un fin de semana con sabor pre-apocaliptico, y el sabor del momento e incertidumbre. A mi ya me mandaron a hacer home office y pareciera la calma antes de la tormenta.
Espero equivocarme
Hace dos semanas mi hermano se casó, fuimos a Mérida a una boda-ceremonia única como el y su esposa, y dije palabras que salieron de mi corazón como su hermano y ser más cercano en el mundo, pase lo que pase..
Ese viaje se sintió como el punto final de una época, y no hay que exagerar, todos los momentos el mundo se termina para volver a empezar..
El mundo gira, mañana traerá sorpresas.
Pero al final todo se sana, permamente impermanencia...
sábado, 7 de diciembre de 2019
Cuando alguien deja de escribir mucho tiempo en este tipo de blogs suele ser porque, o se perdió el interés, o han pasado tantas cosas que realmente no ha habido tiempo de escribir, de reflexionar y de plasmar la experiencia de estar en este mundo y vivir esta vida.
Pero no debería ser así, he visto blogs de años tan lejanos como el 2004, contando cosas tan cotidianas como un café o un concierto. Cosas que ese día eran el momento presente y hoy están perdidas en la noche del tiempo y en la nostalgia y en la memoria del que escribió.
Quiero seguir escribiendo en este diario de hace más de 10 años , entre otras cosas para volverme cronista de uno de los sucesos más importantes de mi vida: estoy enfermo, hepatitis autoinmune y ya es cirrosis. Básicamente mi sistema inmune ha atacado a mi hígado desde los 6 años y el daño ya es muy importante.
Hay tratamientos, hay esperanza hay transplantes pero procesar, interiorizar y vivir algo así es durísimo
Pero acá está la vida , los recuerdos, la nostalgia y saber que cuando se siente nostalgia de un pasado lejano e irrecuperable, hay que saber que este momento algún día será un pasado irrecuperable...
Hay que vivir, disfrutar la música, ver buenas películas, leer buenos libros , salir viajar y conocer
Amar mucho a la persona amada y entender que no tiene nada de malo enfermar y morir
Es solamente un destino que algún día llegará pero como en “I am mine” de Pearl Jam , lo que ocurra entretanto es mío...
Pero no debería ser así, he visto blogs de años tan lejanos como el 2004, contando cosas tan cotidianas como un café o un concierto. Cosas que ese día eran el momento presente y hoy están perdidas en la noche del tiempo y en la nostalgia y en la memoria del que escribió.
Quiero seguir escribiendo en este diario de hace más de 10 años , entre otras cosas para volverme cronista de uno de los sucesos más importantes de mi vida: estoy enfermo, hepatitis autoinmune y ya es cirrosis. Básicamente mi sistema inmune ha atacado a mi hígado desde los 6 años y el daño ya es muy importante.
Hay tratamientos, hay esperanza hay transplantes pero procesar, interiorizar y vivir algo así es durísimo
Pero acá está la vida , los recuerdos, la nostalgia y saber que cuando se siente nostalgia de un pasado lejano e irrecuperable, hay que saber que este momento algún día será un pasado irrecuperable...
Hay que vivir, disfrutar la música, ver buenas películas, leer buenos libros , salir viajar y conocer
Amar mucho a la persona amada y entender que no tiene nada de malo enfermar y morir
Es solamente un destino que algún día llegará pero como en “I am mine” de Pearl Jam , lo que ocurra entretanto es mío...
jueves, 17 de diciembre de 2015
Caledonia, o del Regreso
Ahora que todo ha terminado, me doy cuenta de que esas crónicas, esas historias que prometí ir narrando han quedado incompletas. Aunque no es por falta de ellas, uno no puede irse al otro lado del mundo y no encontrar nada que contar...aunque sea la misma cotidianidad acostumbrada será una cotidianidad con colores distintos...sin embargo, y esto habla en favor mio, nunca encontré realmente el tiempo de transcribir todas esas sensaciones, experiencias, aprendizajes, enseñanzas que son la materia de haberse atrevido a volar, con todas las consecuencias, buenas y malas que eso traiga...
Y es que es cierto, las historias existieron, los castillos, la música, caminar hasta cansarse una misma ruta que de haber sido cotidiana ahora se desvanece, pero la mejor forma de expresar esa sensación es, ¿ahora que sigue?, ahora que se consiguió la victoria se abren nuevos frentes, en la vida no hay victoria definitiva, solo pequeñas, momentáneas, victorias fugaces...
Creo que la forma en que me siento puede ser expresada mejor en este poema, que aquí transcribo:
"Nunca encontramos el Grial.
Los relatos no eran verídicos.
Sólo la fatiga de los caminos aventuró a los que se aventuraron.
Pero se esperaban historias
¿Qué sería de nuestro vivir sin ellas?
Nada se resolvió, hubiéramos podido quedarnos en casa.
Es que somos tan inquietos..
Sin embargo, concluido el viaje, sentimos que en nosotros
-Ya no rehenes de la esperanza-
Había nacido otro temple...
Hay una canción, allá en la tierra de Caledonia, una canción de amor por la patria perdida, una canción que enciende los corazones de los que viven lejos y añoran su tierra, es como siempre, un tema universal y aquí la hago mía, la apropio, con la advertencia de que para mí, esta canción de amor, es para ella, la que me motiva, la que me guía, mi amor bonito....
Annik <3
Caledonia
(Dougie MacClean)
Me pregunto si puedes ver, los cambios que han ocurrido en mi interior. En estos últimos días en que temo estar yendo a la deriva.
He contado historias, cantado, canciones que me hacen recordar de donde vengo, y tal vez, por eso es porque hoy parezco tan distante....
Por eso quiero decirte que te amo, que pienso en ti todo el tiempo, hoy que vuelvo a casa sé que me llamas. Si he de convertirme en un extraño para ti, nada me haría mas triste, verás, eres todo lo que tengo..
He caminado y he volado, probado los puntos que creí que tenía que probar, perdido amigos, los que debía perder, y encontrado otros en el camino....
He conocido personas que quedaron atrás, aunque dejaron una huella sin duda, he viajado con fuerza y a veces volado, hacia donde me llevara el viento
Ahora me encuentro aquí sentado, frente al fuego, en este cuarto vacío, las llamas se han enfriado, ya no calientan más. Y yo tengo mi mente firme, mi camino claro, y sé que es lo que haré el día de mañana. Las despedidas, los abrazos, las palabras, y después desaparecer…
lunes, 29 de septiembre de 2014
Hay que irse para poder volver.... (Viaje de estudios en la Universidad de Glasgow 29/09/2014)
Hace varios meses que no he publicado en este blog, ahora que vuelvo a el, mi vida ha dado giros planificados y sorpresas inesperadas..
Escribo desde otra ciudad..Glasgow en el Reino Unido, en donde estaré estudiando un Máster en Investigación en Derechos Humanos y Política Internacional....
¿Qué razones me han llevado a este lugar, a este proyecto?.. Creo que las razones son múltiples.. no hay una sola, hace un año estaba trabajando para una gran corporación de automóviles (en el área legal), hoy he dejado atrás ese camino para dedicarme..para comenzar a dedicarme a algo que me apasiona; Los Derechos Humanos y el tema del multiculturalismo...
Fueron muchas cosas, muchos factores, pequeños gatillos los que me llevaron a estar aquí, por un lado la música me llevó a conectar con lo que llamo mi familia astral...con un grupo de gente sensible y hermosa que tienen una perspectiva de la vida distinta y colorida, conectar con ellos me hizo preguntarme si no habrían más cosas en el mundo que estar 12 horas diarias pegado a una computadora usando traje y corbata y deseando estar en otro lado. Por otro lado el ejemplo de mi hermano, quien ha tomado vuelos que lo han llevado a recorrer el mundo siempre con inteligencia y decisión....
Poco a poco iré hablando de esta ciudad, de las extrañas y felices coincidencias gracias a las cuales no estoy totalmente solo en una ciudad extraña...de todo aquello que me motiva y vaya encontrando en este trajinar...
Pero por ahora debo decir que estoy agradecido, con todos y cada uno de los que me fueron dirigiendo a este camino, a estos intereses y este re-descubrimiento de mi verdadera esencia...
"Conócete a ti mismo".. la máxima griega aplica hoy en día, no hay deseo mas grande para alguien que decirle "ojalá llegues a ser el que eres.., es decir, aquel que realmente se ha nacido para ser...hoy estoy en una ciudad distante pero mi corazón está con todos y cada uno de los que dejé atrás.. porque los volveré a ver aunque no seré el mismo, mi corazón late con fuerza para el gran amor que me espera en México y el camino que deseo seguir con ella (si, tú, mi nausi =) una vez que llegue a ser el que soy... creo que el hilo que une a un corazón con otro es muy fuerte si se le cultiva y se le cuida...
Poco a poco iré contando de lo que vea.. de lo que escuche de lo que sienta en esta ciudad y en esta universidad tan antigua y tan misteriosa (de apodo le dicen Hogwarts) que tanto me esta gustando,,
Hoy solo puedo decir gracias, gracias a todos los que creen en mi y me han inspirado, los destellos de cada uno me los quedo en mi ser y realmente les sorprendería saber el papel que han tenido cada uno de ellos en conformar lo que soy, lo que pienso, lo que anhelo y lo que busco...
"Go gcuire Dia an t-adh ort"
miércoles, 17 de abril de 2013
El amor, las mujeres y la música.
EL AMOR, LAS MUJERES Y LA MÚSICA EL ARTE MUSICAL EN SCHOPENHAUER A LA LUZ DE “EL MUNDO COMO VOLUNTAD Y REPRESENTACIÓN”
¿Dónde está, oh muerte, tu victoria? ¿Dónde está, oh muerte, tu aguijón? Cor. 15 54-58 (Pasaje que forma parte del Réquiem de J. Brahms)
“Quise quedarme un rato junto a la Ventana del sótano Schubert y sólo Schubert, me dije Era la vida, Sólo su música contenía el secreto de Mantenerme con vida.” O. Sacks “Musicofilia”
Todo el pensamiento de Schopenhauer está guiado por una sola idea inevitable; el sufrimiento es inherente a la vida, y es inherente por que la vida es un continuo desear y deseo es sufrimiento. No puedo contradecir a Schopenhauer en este punto, pareciera que como Sísifo, estamos continuamente afanosos por cargar una piedra con el único fin de tirarla desde una cima y recomenzar de nuevo y así hasta que la muerte finalmente pone fin a nuestros dolores; estamos a la búsqueda de la satisfacción de nuestros deseos y esto solo puede tener dos desenlaces; el primero que lo consigamos y caigamos en la paradoja de que lo que tanto anhelábamos no nos proporciona felicidad constante y perdurable, la segunda de las posibles consecuencias es que nunca consigamos el objetivo deseado y por lo tanto nuestra vida no sea más que un vislumbrar el horizonte de una felicidad postergada. Todo esto es consecuencia en su pensamiento, en el que el mundo no es más que la representación del sujeto y por lo tanto no hay una separación esencial entre sujeto y objeto.
Schopenhauer retoma el camino andado por Kant, quien postuló la distinción –el giro Copernicano, el nuevo paradigma- entre la cosa en sí y la cosa para mí, para Schopenhauer es el fenómeno el que se opone a la cosa en sí, el “ser interior de las cosas”, el único modo filosófico de ver el mundo sería dejar de preguntarse por el “de donde, adónde y por qué” sino exclusivamente por el qué del mundo, preguntarse por las cosas no en relación a alguna otra cosa sino en su esencia.
Es claro que estas ideas vienen de fuentes muy diversas; entre ellas el pensamiento oriental –representado por las filosofías hinduistas y budistas-, el pensamiento platónico que se pregunta por las formas arquetípicas y por supuesto Kant, es posible que conociera la enseñanza del Buda en la que dice que preocuparse por la existencia o no de un Dios, o de un origen primero y esencial, sería tanto como si una persona herida por una flecha se cuestionara por la madera del proyectil, el nombre del arquero, el nombre de sus hijos… entonces el sufrimiento es la verdad más evidente “sufro luego existo” pero ¿porqué el sufrimiento?, aventura la respuesta de que el sufrimiento sobreviene por una falta de perspectiva que es consecuencia del principium individuationis; sufrimos porque no conocemos la realidad, solo su apariencia y esa ignorancia nos genera sufrimiento.
De nuevo leemos a Schopenhauer en clave oriental: para el pensamiento Budista la ignorancia es la clave del sufrimiento, esta ignorancia se centra en que:
Creemos que las cosas están separadas entre sí, cuando en realidad todo conforma una unidad.
Creemos que la realidad está destinada a permanecer cuando todo se encuentra dominado por la no-permanencia
Creemos que las cosas tienen una identidad sustancial cuando en realidad no la tienen sino que se encuentran en un cambio constante
Estas realidades: no-permanencia, inexistencia, generan sufrimiento (Dukha en Sánscrito) porque estamos todo el tiempo motivados por nuestros deseos.
En “El amor, las mujeres y la muerte” Schopenhauer confirma con creces este pensamiento; “todo deseo nace de una necesidad, de una privación, de un sufrimiento. Satisfaciéndolo se calma. Más por cada deseo satisfecho ¡Cuantos sin satisfacer¡, Además, el deseo dura largo tiempo, las exigencias son infinitas, el goce es corto y mezquinamente tasado”. Schopenhauer no da cuartel, nuestra situación es lamentable y lo más que podemos hacer es olvidarnos momentáneamente de esta (a menos que emprendamos el camino de la renuncia absoluta, el cual describe en la parte final de “El mundo como voluntad y representación”) sin embargo encuentra una virtud sutil que se desprende del arte (en general) que es la capacidad de observar al hombre y al mundo en su carácter trágico, cómico, patético…pero desde el punto de vista del observador imparcial, un vistazo desinteresado a nuestra propia naturaleza como si no estuviéramos implicados en esa historia, de hecho, el mismo Schopenhauer relata cómo cuando era joven “se esforzaba en representarse todos sus actos como si se tratase de otro “probablemente para gozar más de ellos” (no puedo negar que yo también lo he intentado) a continuación trataré de descifrar, entender el pensamiento de Schopenhauer respecto al arte, partiendo del hecho de que por obvias razones él tuvo mucho más contacto con el arte Occidental de su tiempo que con el arte de otras regiones del mundo; ¿El pensamiento de Schopenhauer respecto del arte se puede entender en un sentido universal? Es decir ¿todo el arte humano en su universalidad sirve para echar una mirada desinteresada a los afanes de la vida, hacerlos aparecer llenos de interés y de encanto?, las cosas solo tendrán atractivo en tanto que no nos atañan…si nos viéramos implicados en la trama ya no nos parecería tan graciosa la historia. En “El amor…” nuestro autor se enfrasca en un análisis de cada una de las bellas artes a la luz de su pensamiento:
La pintura: Esta nos agrada porque nos da la oportunidad de echar una mirada desinteresada al mundo; las cosas no tienen atractivo sino en tanto que no nos atañen, para él la vida no es bella, sólo es bella cuando se representa en un cuadro o una pintura. Schopenhauer no pudo conocer, por supuesto, las corrientes artísticas que surgirían a finales del siglo XIX y en el siglo XX, en éstas corrientes no se está representando propiamente una escena de la vida, o de la mitología, este es el arte subjetivo: cubismo, impresionismo, surrealismo..¿sigue teniendo vigencia el pensamiento se Schopenhauer?, si concedemos que ahora el artista está representando su mundo interior como una manera de expresión, pero que tiende a la universalidad probablemente si siga teniendo vigencia la idea de S., es decir cuando yo veo “El grito” o “El Guernica”, sigo asomándome al dolor universal, pero sigo siendo un mero espectador y por lo tanto lo puedo tolerar.
La poesía: Para S. el poeta es el hombre universal, el espejo de la humanidad quien tiene licencia para cantar la voluptuosidad o el misticismo, revolcarse en el fago o volar en las alturas… a mi parecer esto sigue siendo vigente tanto en la poesía que vino después de S. como en las expresiones poéticas que conoció poco o nada (la obra poética de los pueblos de Mesoamérica, por ejemplo), la poesía tiene el don y la capacidad de representar la tragedia de la vida humana y su castigo de un modo transversal: si el pecado es existir y el culpable es todo ser viviente, no importa sobre quien recaiga el castigo porque todos somos culpables, todos somos el mismo. (ta tvam asi)
La comedia y el drama: me parece una idea muy interesante de S. aquella en la que expresa que la humanidad vista en su conjunto siempre nos resultará trágica, pero vista en su individualidad siempre tendrá aires de comedia, cuando nos enfrentamos a las incidencias cotidianas difícilmente nos enfrentamos a momentos profundos de luz u oscuridad desesperantes, al final de nuestra vida tal vez hagamos un recuento y tengamos que afrontar con resignación el estado de resultados pero hoy por hoy no me preocupa otra cosa más que llegar temprano a casa y prepararme una rica cena. Toda la obra artística posterior a S. confirma a mi parecer esta idea, aún con todas las corrientes artísticas e ideas originales que han sobrevenido… dice Borges que toda la historia de las historias se reducen a la repetición de dos o tres temas recurrentes… a lo mucho. La arquitectura: S. jerarquiza las artes, para él “La arquitectura es inferior. Es la objetivación de la voluntad como un oscuro inconsciente y mecánico impulso de la materia, que sin embargo manifiesta en su interior la lucha o conflicto, la arquitectura “música congelada” solo representa el contexto donde se desenvuelve el drama humano, o el drama de la voluntad es. XX o escuelas como la de Bauhaus donde priva la sencillez y se interpreta el lujo como una afrenta, podemos suponer que este tema no le habría interesado mucho.
La música: Dice Simone de Beauvoir que cuando era adolescente, los libros la salvaron de la desesperación, y que esto fue lo que la persuadió de que la cultura es el más alto de los valores y por lo tanto, es incapaz de considerar esta convicción con mirada crítica , yo afirmo lo mismo respecto de la música, no hay forma en que sea imparcial cuando hablo de música, me apasiona demasiado. De lo que afirma en “El amor…” pareciera que S. comparte esa pasión profunda por la música, de su jerarquización de expresiones artistas la música ocupa el lugar más alto, para él la música es la expresión de la esencia de “la cosa en sí”, nunca del fenómeno y por lo tanto es una manifestación de la voluntad misma, nunca es aplicable solo a un fenómeno del alma en cuanto a su individualidad, nunca expresa “la alegría de A o la tristeza de B” expresa la misma alegría, la misma tristeza el dolor o el espanto, es manifestación de la esencia sin tener que estar en relación con alguna otra cosa, y sin embargo todos (o casi todos) nos conmovemos en determinado momento por ella. En “El mundo...” S. nos dice que la en la melodía reconocemos la historia íntima de la voluntad consciente de sí misma expresada de forma universal, es decir que la música es el canal por medio del cual tenemos acceso, al menos por un momento, a lo que se encuentra detrás del Velo de Maya, el mundo sin epifenómenos sino como una unidad, como cuando parecemos estar al acecho de una profunda revelación metafísica pero nos quedamos en la orilla del océano, apenas vislumbrando aquello que no somos capaces de comprender.
¿En que se parece una melodía a la vida?, para S. es una desviación de la tónica “a través de mil extravíos admirables”, para llegar a la disonancia, al clímax donde volvemos a la tónica y finalmente apaciguamos la voluntad. ¿Qué diría S. de las composiciones atonales de Schönberg?, por no hablar de los experimentos de sonido 13 de J. Carrillo (refiriéndose a los micro tonos es decir aquel que puede encontrarse entre un do y un do sostenido), a la luz de su pensamiento esto podría ser un mero experimento o bagatela o una afirmación del vacío que se esconde detrás de todo fenómeno, ¿si alguien es capaz de conmoverse por una obra atonal, no significa esto una confirmación de que la música es el arte más abstracto y por lo tanto el más cercano a “la cosa en sí”?, pero sigamos viendo que piensa S. de la música. Para S. la acción del compositor es una verdadera inspiración, manifiesta algo que no le viene del el mismo como individuo sino “de fuera” (aunque en realidad S. diría que la voluntad es una misma objetivada en el fenómeno del individuo), el compositor expresa algo que ni el mismo comprende, solo sería un canal para transmitir una esencia; la esencia del mundo.
Sigue manifestándose el efecto del arte como aquello que presta voz a nuestras agitaciones más íntimas pero fuera de la realidad objetivada, por lo tanto libres del sufrimiento concreto, la música es por lo tanto el canal más directo porque es el más abstracto y universal: “la música constituye una revelación más alta que ninguna filosofía” dice L.V Beethoven, yo comparto con Schopenhauer el asombro de que la conformación de la armonía en dos tonalidades pueda expresar por lo menos y con nítida claridad dos emociones: la alegría y la tristeza, el acorde mayor y el acorde menor (lo que define que un acorde sea mayor o menor es la tercera, si esta es una tercera bemol, el acorde será mayor p.ej C-Eb-G conforman un C menor y C-E-G conforman un C mayor), de forma puntual y extraordinaria un acorde menor siempre va a ser oscuro y melancólico, y un acorde mayor siempre será alegre o al menos “contento”.
S. hace un esbozo de etnomusicología cuando nos recuerda que los pueblos del norte generalmente tienen una tendencia al bemol, porque su vida es dura y áspera, por otro lado (esto no lo dice S.) Los pueblos de tierras más cálidas tenderían a componer música con acordes mayores y en ritmos más alegres. Hoy en día tenemos accesos a música de todo el mundo; música hindú (que no puedo dejar de preguntarme si Schopenhauer habrá tenido accesos a ella), música africana, mesoamericana etc… no podemos negar que la música de cada región del mundo parece contener en sus sonidos el alma inexpresable de cada pueblo pero lo que es aún más sorprendente es que seamos capaces de conmovernos por la música de regiones lejanas, como si la música trascendiera todo lenguaje.
Para S. la sinfonía es la expresión más alta de la música (alemán, europeo, post-romántico) dice que “una sinfonía de Beethoven nos descubre un orden maravilloso bajo un desorden aparente, es como un combate encarnizado, que un instante después se resuelve en un hermoso acorde” , a través de la sinfonía (y esto es cierto) hablan todas las pasiones y todas las emociones humanas alegría, tristeza, amor, odio, espanto, esperanza… todo esto con matices infinitos y sin embargo enteramente abstractos, coherente hasta el fin, Schopenhauer recomienda ampliamente el goce de la música, el goce sincero porque es algo semejante a “un baño del alma que purifica de toda mancha, de todo lo malo y mezquino, y pone al hombre de acuerdo con los más nobles pensamientos de que es capaz”, coherente hasta el fin nos sugiere que la música nos quiere recordar algo; que la vida de todos no es más que el sueño de algún espíritu eterno y que cada muerte es, en realidad, un despertar.
¿Puede la música redimirnos? Para S. es claro que no, al final de cuentas la única forma de librarse del apetito infinito es, paradójicamente, dejar de sentir apetito y para lograr esto no hay otro camino que atreverse, de forma constante y disciplinada, a negarse toda satisfacción del deseo, esta es la idea final que cierra la exposición de “El Mundo Como Voluntad y Representación”, la única vía es la del ascetismo, no deja de ser llamativo el hecho de que para un sistema de pensamiento que no contempla a Dios ni a alguna realidad superior, la única vía para cesar de sufrir es la misma que para aquellos esquemas que contemplan a Dioses, por eso mismo S. veía en la religión Cristiana alguna que otra cosa de valor.
Me parece que el pensamiento de Schopenhauer es uno en el que podemos abordar casi cualquier tema (el amor, la política, la religión, el arte) y leerlo en clave “Schopenhaueriana”, esto ocurre porque es una filosofía que se asiente firmemente en un punto clave: la única realidad última es la voluntad. Nuestras vidas, nuestros anhelos y nuestros egoísmos mezquinos no son más que manifestaciones de esa voluntad que en este mundo se manifiesta como una voluntad irracional y sin sentido que se afirma en el mero vivir; nada es lo que aparenta (Schopenhauer el lector de los Vedas); el amor no es amor, es una celada de la naturaleza… el arte nos conmueve porque es universal, no me habla a mí, le habla a lo universal que hay en mi… la política, no es más que el juego de los egoísmos contrapuestos… la justicia es el modo de contener al más fuerte sobre el más débil… y un largo etcétera, si otorgamos crédito a la idea originaria todo lo demás tiene sentido, como un edificio que se asienta firmemente sobre un cimiento que puede o no ser real. Elegí hablar de la música porque no puedo negar que es una fuerza tremenda que nos mueve, aun cuando no seamos conscientes de ello, baste mirar a las personas en un concierto donde, parafraseando a Cortázar: “se vive la ilusión de estar juntos al margen del mundo. La creación de una atmósfera donde la música afloja las resistencias y teje como una respiración común, la paz de un solo enorme corazón latiendo para todos, asumiéndolos a todos” , Schopenhauer el misántropo se conmueve ante la belleza de la música. Al final, tomemos o no el camino del asceta, podemos acceder si nos damos la oportunidad a esa otra realidad “la que de verdad nos importa” y redimir -aunque sea por un momento- todo el dolor del mundo.
Schopenhauer retoma el camino andado por Kant, quien postuló la distinción –el giro Copernicano, el nuevo paradigma- entre la cosa en sí y la cosa para mí, para Schopenhauer es el fenómeno el que se opone a la cosa en sí, el “ser interior de las cosas”, el único modo filosófico de ver el mundo sería dejar de preguntarse por el “de donde, adónde y por qué” sino exclusivamente por el qué del mundo, preguntarse por las cosas no en relación a alguna otra cosa sino en su esencia.
Es claro que estas ideas vienen de fuentes muy diversas; entre ellas el pensamiento oriental –representado por las filosofías hinduistas y budistas-, el pensamiento platónico que se pregunta por las formas arquetípicas y por supuesto Kant, es posible que conociera la enseñanza del Buda en la que dice que preocuparse por la existencia o no de un Dios, o de un origen primero y esencial, sería tanto como si una persona herida por una flecha se cuestionara por la madera del proyectil, el nombre del arquero, el nombre de sus hijos… entonces el sufrimiento es la verdad más evidente “sufro luego existo” pero ¿porqué el sufrimiento?, aventura la respuesta de que el sufrimiento sobreviene por una falta de perspectiva que es consecuencia del principium individuationis; sufrimos porque no conocemos la realidad, solo su apariencia y esa ignorancia nos genera sufrimiento.
De nuevo leemos a Schopenhauer en clave oriental: para el pensamiento Budista la ignorancia es la clave del sufrimiento, esta ignorancia se centra en que:
Creemos que las cosas están separadas entre sí, cuando en realidad todo conforma una unidad.
Creemos que la realidad está destinada a permanecer cuando todo se encuentra dominado por la no-permanencia
Creemos que las cosas tienen una identidad sustancial cuando en realidad no la tienen sino que se encuentran en un cambio constante
Estas realidades: no-permanencia, inexistencia, generan sufrimiento (Dukha en Sánscrito) porque estamos todo el tiempo motivados por nuestros deseos.
En “El amor, las mujeres y la muerte” Schopenhauer confirma con creces este pensamiento; “todo deseo nace de una necesidad, de una privación, de un sufrimiento. Satisfaciéndolo se calma. Más por cada deseo satisfecho ¡Cuantos sin satisfacer¡, Además, el deseo dura largo tiempo, las exigencias son infinitas, el goce es corto y mezquinamente tasado”. Schopenhauer no da cuartel, nuestra situación es lamentable y lo más que podemos hacer es olvidarnos momentáneamente de esta (a menos que emprendamos el camino de la renuncia absoluta, el cual describe en la parte final de “El mundo como voluntad y representación”) sin embargo encuentra una virtud sutil que se desprende del arte (en general) que es la capacidad de observar al hombre y al mundo en su carácter trágico, cómico, patético…pero desde el punto de vista del observador imparcial, un vistazo desinteresado a nuestra propia naturaleza como si no estuviéramos implicados en esa historia, de hecho, el mismo Schopenhauer relata cómo cuando era joven “se esforzaba en representarse todos sus actos como si se tratase de otro “probablemente para gozar más de ellos” (no puedo negar que yo también lo he intentado) a continuación trataré de descifrar, entender el pensamiento de Schopenhauer respecto al arte, partiendo del hecho de que por obvias razones él tuvo mucho más contacto con el arte Occidental de su tiempo que con el arte de otras regiones del mundo; ¿El pensamiento de Schopenhauer respecto del arte se puede entender en un sentido universal? Es decir ¿todo el arte humano en su universalidad sirve para echar una mirada desinteresada a los afanes de la vida, hacerlos aparecer llenos de interés y de encanto?, las cosas solo tendrán atractivo en tanto que no nos atañan…si nos viéramos implicados en la trama ya no nos parecería tan graciosa la historia. En “El amor…” nuestro autor se enfrasca en un análisis de cada una de las bellas artes a la luz de su pensamiento:
La pintura: Esta nos agrada porque nos da la oportunidad de echar una mirada desinteresada al mundo; las cosas no tienen atractivo sino en tanto que no nos atañen, para él la vida no es bella, sólo es bella cuando se representa en un cuadro o una pintura. Schopenhauer no pudo conocer, por supuesto, las corrientes artísticas que surgirían a finales del siglo XIX y en el siglo XX, en éstas corrientes no se está representando propiamente una escena de la vida, o de la mitología, este es el arte subjetivo: cubismo, impresionismo, surrealismo..¿sigue teniendo vigencia el pensamiento se Schopenhauer?, si concedemos que ahora el artista está representando su mundo interior como una manera de expresión, pero que tiende a la universalidad probablemente si siga teniendo vigencia la idea de S., es decir cuando yo veo “El grito” o “El Guernica”, sigo asomándome al dolor universal, pero sigo siendo un mero espectador y por lo tanto lo puedo tolerar.
La poesía: Para S. el poeta es el hombre universal, el espejo de la humanidad quien tiene licencia para cantar la voluptuosidad o el misticismo, revolcarse en el fago o volar en las alturas… a mi parecer esto sigue siendo vigente tanto en la poesía que vino después de S. como en las expresiones poéticas que conoció poco o nada (la obra poética de los pueblos de Mesoamérica, por ejemplo), la poesía tiene el don y la capacidad de representar la tragedia de la vida humana y su castigo de un modo transversal: si el pecado es existir y el culpable es todo ser viviente, no importa sobre quien recaiga el castigo porque todos somos culpables, todos somos el mismo. (ta tvam asi)
La comedia y el drama: me parece una idea muy interesante de S. aquella en la que expresa que la humanidad vista en su conjunto siempre nos resultará trágica, pero vista en su individualidad siempre tendrá aires de comedia, cuando nos enfrentamos a las incidencias cotidianas difícilmente nos enfrentamos a momentos profundos de luz u oscuridad desesperantes, al final de nuestra vida tal vez hagamos un recuento y tengamos que afrontar con resignación el estado de resultados pero hoy por hoy no me preocupa otra cosa más que llegar temprano a casa y prepararme una rica cena. Toda la obra artística posterior a S. confirma a mi parecer esta idea, aún con todas las corrientes artísticas e ideas originales que han sobrevenido… dice Borges que toda la historia de las historias se reducen a la repetición de dos o tres temas recurrentes… a lo mucho. La arquitectura: S. jerarquiza las artes, para él “La arquitectura es inferior. Es la objetivación de la voluntad como un oscuro inconsciente y mecánico impulso de la materia, que sin embargo manifiesta en su interior la lucha o conflicto, la arquitectura “música congelada” solo representa el contexto donde se desenvuelve el drama humano, o el drama de la voluntad es. XX o escuelas como la de Bauhaus donde priva la sencillez y se interpreta el lujo como una afrenta, podemos suponer que este tema no le habría interesado mucho.
La música: Dice Simone de Beauvoir que cuando era adolescente, los libros la salvaron de la desesperación, y que esto fue lo que la persuadió de que la cultura es el más alto de los valores y por lo tanto, es incapaz de considerar esta convicción con mirada crítica , yo afirmo lo mismo respecto de la música, no hay forma en que sea imparcial cuando hablo de música, me apasiona demasiado. De lo que afirma en “El amor…” pareciera que S. comparte esa pasión profunda por la música, de su jerarquización de expresiones artistas la música ocupa el lugar más alto, para él la música es la expresión de la esencia de “la cosa en sí”, nunca del fenómeno y por lo tanto es una manifestación de la voluntad misma, nunca es aplicable solo a un fenómeno del alma en cuanto a su individualidad, nunca expresa “la alegría de A o la tristeza de B” expresa la misma alegría, la misma tristeza el dolor o el espanto, es manifestación de la esencia sin tener que estar en relación con alguna otra cosa, y sin embargo todos (o casi todos) nos conmovemos en determinado momento por ella. En “El mundo...” S. nos dice que la en la melodía reconocemos la historia íntima de la voluntad consciente de sí misma expresada de forma universal, es decir que la música es el canal por medio del cual tenemos acceso, al menos por un momento, a lo que se encuentra detrás del Velo de Maya, el mundo sin epifenómenos sino como una unidad, como cuando parecemos estar al acecho de una profunda revelación metafísica pero nos quedamos en la orilla del océano, apenas vislumbrando aquello que no somos capaces de comprender.
¿En que se parece una melodía a la vida?, para S. es una desviación de la tónica “a través de mil extravíos admirables”, para llegar a la disonancia, al clímax donde volvemos a la tónica y finalmente apaciguamos la voluntad. ¿Qué diría S. de las composiciones atonales de Schönberg?, por no hablar de los experimentos de sonido 13 de J. Carrillo (refiriéndose a los micro tonos es decir aquel que puede encontrarse entre un do y un do sostenido), a la luz de su pensamiento esto podría ser un mero experimento o bagatela o una afirmación del vacío que se esconde detrás de todo fenómeno, ¿si alguien es capaz de conmoverse por una obra atonal, no significa esto una confirmación de que la música es el arte más abstracto y por lo tanto el más cercano a “la cosa en sí”?, pero sigamos viendo que piensa S. de la música. Para S. la acción del compositor es una verdadera inspiración, manifiesta algo que no le viene del el mismo como individuo sino “de fuera” (aunque en realidad S. diría que la voluntad es una misma objetivada en el fenómeno del individuo), el compositor expresa algo que ni el mismo comprende, solo sería un canal para transmitir una esencia; la esencia del mundo.
Sigue manifestándose el efecto del arte como aquello que presta voz a nuestras agitaciones más íntimas pero fuera de la realidad objetivada, por lo tanto libres del sufrimiento concreto, la música es por lo tanto el canal más directo porque es el más abstracto y universal: “la música constituye una revelación más alta que ninguna filosofía” dice L.V Beethoven, yo comparto con Schopenhauer el asombro de que la conformación de la armonía en dos tonalidades pueda expresar por lo menos y con nítida claridad dos emociones: la alegría y la tristeza, el acorde mayor y el acorde menor (lo que define que un acorde sea mayor o menor es la tercera, si esta es una tercera bemol, el acorde será mayor p.ej C-Eb-G conforman un C menor y C-E-G conforman un C mayor), de forma puntual y extraordinaria un acorde menor siempre va a ser oscuro y melancólico, y un acorde mayor siempre será alegre o al menos “contento”.
S. hace un esbozo de etnomusicología cuando nos recuerda que los pueblos del norte generalmente tienen una tendencia al bemol, porque su vida es dura y áspera, por otro lado (esto no lo dice S.) Los pueblos de tierras más cálidas tenderían a componer música con acordes mayores y en ritmos más alegres. Hoy en día tenemos accesos a música de todo el mundo; música hindú (que no puedo dejar de preguntarme si Schopenhauer habrá tenido accesos a ella), música africana, mesoamericana etc… no podemos negar que la música de cada región del mundo parece contener en sus sonidos el alma inexpresable de cada pueblo pero lo que es aún más sorprendente es que seamos capaces de conmovernos por la música de regiones lejanas, como si la música trascendiera todo lenguaje.
Para S. la sinfonía es la expresión más alta de la música (alemán, europeo, post-romántico) dice que “una sinfonía de Beethoven nos descubre un orden maravilloso bajo un desorden aparente, es como un combate encarnizado, que un instante después se resuelve en un hermoso acorde” , a través de la sinfonía (y esto es cierto) hablan todas las pasiones y todas las emociones humanas alegría, tristeza, amor, odio, espanto, esperanza… todo esto con matices infinitos y sin embargo enteramente abstractos, coherente hasta el fin, Schopenhauer recomienda ampliamente el goce de la música, el goce sincero porque es algo semejante a “un baño del alma que purifica de toda mancha, de todo lo malo y mezquino, y pone al hombre de acuerdo con los más nobles pensamientos de que es capaz”, coherente hasta el fin nos sugiere que la música nos quiere recordar algo; que la vida de todos no es más que el sueño de algún espíritu eterno y que cada muerte es, en realidad, un despertar.
¿Puede la música redimirnos? Para S. es claro que no, al final de cuentas la única forma de librarse del apetito infinito es, paradójicamente, dejar de sentir apetito y para lograr esto no hay otro camino que atreverse, de forma constante y disciplinada, a negarse toda satisfacción del deseo, esta es la idea final que cierra la exposición de “El Mundo Como Voluntad y Representación”, la única vía es la del ascetismo, no deja de ser llamativo el hecho de que para un sistema de pensamiento que no contempla a Dios ni a alguna realidad superior, la única vía para cesar de sufrir es la misma que para aquellos esquemas que contemplan a Dioses, por eso mismo S. veía en la religión Cristiana alguna que otra cosa de valor.
Me parece que el pensamiento de Schopenhauer es uno en el que podemos abordar casi cualquier tema (el amor, la política, la religión, el arte) y leerlo en clave “Schopenhaueriana”, esto ocurre porque es una filosofía que se asiente firmemente en un punto clave: la única realidad última es la voluntad. Nuestras vidas, nuestros anhelos y nuestros egoísmos mezquinos no son más que manifestaciones de esa voluntad que en este mundo se manifiesta como una voluntad irracional y sin sentido que se afirma en el mero vivir; nada es lo que aparenta (Schopenhauer el lector de los Vedas); el amor no es amor, es una celada de la naturaleza… el arte nos conmueve porque es universal, no me habla a mí, le habla a lo universal que hay en mi… la política, no es más que el juego de los egoísmos contrapuestos… la justicia es el modo de contener al más fuerte sobre el más débil… y un largo etcétera, si otorgamos crédito a la idea originaria todo lo demás tiene sentido, como un edificio que se asienta firmemente sobre un cimiento que puede o no ser real. Elegí hablar de la música porque no puedo negar que es una fuerza tremenda que nos mueve, aun cuando no seamos conscientes de ello, baste mirar a las personas en un concierto donde, parafraseando a Cortázar: “se vive la ilusión de estar juntos al margen del mundo. La creación de una atmósfera donde la música afloja las resistencias y teje como una respiración común, la paz de un solo enorme corazón latiendo para todos, asumiéndolos a todos” , Schopenhauer el misántropo se conmueve ante la belleza de la música. Al final, tomemos o no el camino del asceta, podemos acceder si nos damos la oportunidad a esa otra realidad “la que de verdad nos importa” y redimir -aunque sea por un momento- todo el dolor del mundo.
miércoles, 7 de noviembre de 2012
Coordenadas
Dado que la hoja en la que voy a escribir este ensayo es cuadriculada, visto que soy fóbico a perderme en la Ciudad de México y encima llevo más de seis meses viviendo con crisis vocacional (ya resuelta). Creo que mi ensayo se titulará: "coordenadas", coordenadas en un sentido cartográfico y metafórico, vitalmente metafórico.
¿Es posible tener un mapa vital o es pura patraña todo aquello que suene a "cómo debes vivir tu vida" o "tu puedes sanar tu vida"? patrañas que saben a librería de Sanborns....
En un mapa, en cualquier mapa, siempre están ausentes los elementos más importantes, me explico: puedes saber que la "Calle de la Amargura" hace esquina con "Estrella Errante" y que para llegar ahí lo más práctico es tomar la Avenida "Vía Láctea", pero un mapa nunca te va a decir que cuando llegues va a estar lloviendo, si va a hacer frío o si de camino te cruzarás con el amor de tu vida...o peor aún si serás asaltado..
Un mapa, en este caso, no sirve de mucho.
Si le añadimos que en esta Ciudad llevamos quien sabe cuantos años en obra constante y que las calles pueden estar cerradas, bloqueadas, inundadas o simplemente ya no existir....concluimos que un mapa, sea Google Maps, o la Guía Roji no te va a servir de mucho.
Si un mapa de la Ciudad de México o de cualquier ciudad del mundo te dice tan poco, ¿Qué podemos pensar de esas personas que tienen trazado "el mapa de su vida": a los 30 voy estar aquí, a los 40 acá y a los 50 acuyá....lo digo porque siento que, subjetivamente, mi vida no ha seguido una cartografía tan precisa, en otras palabras que soy un fracaso o un desastre total: si me hubiera trazado como meta alcanzar la cúspide de la vida profesional antes de los 30, veo que se me agota el tiempo....emanciparme..tampoco lo puedo tachar todavía de mi lista de los "por hacer"...ya no digamos encontrar el amor, !Es que nisiquiera sé por donde empezar a buscarlo¡, en fin que más que un bólido o un aeroplano en línea recta a su destino, más bien me siento como un pedazo de madera en el oceano que va a la deriva sin rumbo fijo.
Cuando pienso en el tiempo y en la consecución de metas inmediatamente pienso en la relatividad del mismo tiempo -clichés aparte- por ejemplo: hace unos días el tema de moda era una megatormenta en la ciudad de Nueva York: "The Perfect Storm" le decían,justo por esos días leí en algún lado que las manchas rojas en el planeta Júpiter son Huracánes de trescientos años, la "Tormenta Perfecta" de Nueva York pasó pero las Tormentas Rojas de Júpiter siguen ahí y seguirán al menos por todas nuestras vidas.
Si hablé de mis dilemas existenciales (cosa que no estoy seguro si es permitida en un ensayo) fue para ejemplificar algo; No hay tormentas perfectas, siempre habrá una tormenta mejor, si digo que llevo 6 meses viviendo una crisis vocacional también fue para puntualizar algo: que ya fue resuelta.
Creo que fue San Agustín quien dijo: "Conócete, exígete, supérate", el problema es que todo siempre está en constante cambio !incluso uno mismo¡, en este caso no hay coordenadas que sirvan para llegar a un punto deseado, mucho menos para "triunfar en la vida" (o escribir un ensayo).
Mi hermano tiene una frase: "Los finales felices son para los débiles", de entrada uno pudiera pensar que es una frase amargada, pero no, si uno le piensa verá que tendemos a pensar la vida como una película, pero la vida tampoco es como una película, (habiendo dejado en claro que no es como un mapa), las películas tienen final y son lineales pero la vida es como un continuum donde cada supuesta victoria sólo es la preparación para una nueva batalla, se abren nuevos frentes; los finales felices son para los conformistas.
Además un guión cinematográfico no admite improvisación y la vida sí, la vida no es un guión ni un mapa ni nada parecido, tampoco es una cuadrícula de una hoja de cuaderno, pienso esto porque estoy escribiendo este ensayo apresuradamente y mal y apenas puedo respetar la cuadrícula predeterminada, pero pude haber elegido escibir todo de corrido sin dejar renglones en blanco, pude haber preferido escribir dejando dos renglones entre cada frase, pude haber elegido alternar entre una hoja en blanco y una escrita....pero la vida tampoco es una hoja en blanco o cuadriculada, por el simple motivo de que la vida es una historia ya empezada, cómo dice alguno de los personajes de la Rayuela de Cortázar; es como entrar a una película o una obra de teatro que ya comenzó y que no sabemos muy bien el hilo de la historia ni porqué todo es tan lindo (o terrible).
¿Entonces de que sirven los mapas o los guiones? creo que nos sirven sólo como guía para llegar a algún lugar, para no extraviarse espantosamente, para que no pase como alguna vez me pasó; querer llegar a la Avenida de los poetas y terminar en la salida a Querétaro (los que vivimos en la Ciudad de México entendermos que esto sí es perderse espantosamente).
Un mapa no te va a decir qué puedes hacer para entretenerte en el camino, o qué música escuchar, si debes ir en camión, o en bicicleta o caminando. Tampoco te va a decir si de camino te vas a encontrar con un árbol centenario y le vas a querer tomar fotos, o si vas a encontrarte con un viejo amigo que te va a invitar una cerveza para ponerse al día y por lo tanto ya no vas a llegar a tu destino, sea una cita romántica o de negocios..(habrá personas que les dé lo mismo una cita de negocios a una romántica o que de plano les emocionen más los negocios...eso aparentan.) Entonces el mapa ya no sirvió de mucho -acabaste en otro lado al que te habías propuesto originalmente.
Un mapa no se parece entonces a la vida, ni a los guiones cinematográficos, o a las cuadrículas del cuaderno o a una hoja en blanco o a los libros de superación personal que te dan paso por paso como ser feliz y no morir en el intento.
A lo mejor se parecerá a las partituras musicales (son algún tipo de mapa), pero muchos músicos (los he visto), se entusiasman tanto que terminan olvidando las frías indicaciones de la partitura, terminan olvdando hasta la cuenta de los días (Cronopios Cortazarianos).
Tratando de redimir a los mapas, los libros de autoayuda, las hojas cuadriculadas, los guiones cinematográficos o las partituras musicales, diría que si no te van a llevar a donde quieres llegar, al menos te ayudarán a no perderte horriblemente (y acabar en la salida a Querétaro cuando lo que querías era llegar a Avenida de los poetas). Al menos te darán el primer impulso para tomar camino -ya será cuestión de suerte que el camino te lleve a donde querías llegar- o si ocurre como propone el guardagujas de Arreola: que tomes el tren con la posibilidad abierta de que llegue a un punto donde ya no hubo rieles y las circunstancias te obliguen a formar una bonita comunidad en medio de la selva y -quien sabe- termines prefiriendo ese destino al destino deseado originalmente.
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